miércoles, 19 de diciembre de 2018

El Jefe cuento de Julio Ramón Ribeyro (resumen)


El directorio de la casa Ferrolux S.A. daba una fiesta a sus empleados por que se inauguraba su nuevo Club Social.
Alquilaron un local, los empleados iban llegando muy arreglados. Eusebio Zapatero, ayudante de contador, degustaba sin perder ocasión el ron con hielo y limón. A eso de las 10 de la noche se dio por terminada la fiesta pues era un evento de confraternidad.
Eusebio merodeaba alrededor de su jefe, Felipe Bueno, y se sorprendió al ingresar en el grupo donde este estaba, al ascensor. El entusiasmo llego cuando su jefe les invito a tomar un tragó en el hotel Ambassadeur. El apoderado pido un wisky para todos. La tirantez se iba cada vez más y Eusebio pensó que podría aprovechar para pedir un aumento. Finalmente, quedaron él, el apoderado, y tres colegas más. Trató de emborracharlos, y ellos luego se retiraron dejándolos solos, caminaron y entraron a un local a tomar coñac. Entre las copas Felipe y Eusebio se tutearon, Eusebio dice que para los amigos es “Bito” y el jefe dice que su esposa le dice “Pim”.
A las cinco de la mañana, muy borrachos y cantando un vals, “Bito” embarco a “Pim” en un taxi. Tres horas más tarde, Eusebio con 10 minutos de retraso llego a la oficina y pidió ver a Felipe ante el asombro de la secretaria. Entro sin anunciarse, sigilosamente se acercó al jefe y le dijo: “Pim”, el apoderado frío e inapelable le contesto: “Buenos días…señor Eusebio Zapatero”. Y continúo leyendo su correspondencia.  

                                  

No hay comentarios:

Publicar un comentario